El tarjetazo embaucador

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Darloup
 
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El tarjetazo embaucador

Message : # 3385Message Darloup »

Por Lola Salcedo C.

Muchos vemos con preocupación el endeudamiento endiablado de los colombianos, que debe estar llevando al orgasmo en dólares a la banca, gran estimuladora y proveedora de tarjetas de crédito: casi todo lo puede comprar la tarjetica que, como por ensalmo, al deslizarla por una maquinita le dice al vendedor –ok, a fin de mes te pago—, y al encantado consumidor, --estás enganchado conmigo, me debes el artículo y la financiación--. Pero cuando cualquiera alza la bolsa donde viene lo deseado, ese placer pocos otros lo reemplazarían.

Me parece simple: la tarjeta de crédito trae al aquí y ahora lo que es una quimera, el objeto de deseo. Y en una vida azarosa como la que llevamos todos, la posibilidad de cortar de un tarjetazo esa sensación horrible de no tener el efectivo, es casi una cura para momentos de total descontento, soledad, reivindicación. Sí, esta última es el caso de las señoras que, cuando se enteran de que son engañadas, agarran el plástico, y, ¡dele, vámonos de compras!

Hasta aquí vamos bien, porque habrán notado que describo “deseo” “quimera” y, esa solución solo puede aplicarla quien vive en “modo muelle”, es decir, no tiene que preocuparse por servicios, vivienda, gasolina, educación. Esa parte la tienen asegurada de antemano.

Lo que parece peligroso es la cantidad de gente pagando su mercado quincenal con tarjeta de crédito. Ese es un signo de cuidado y ojalá no lo pasen por alto. No es cocinado mío, se lo vengo escuchando a importantes analistas. Lo mío es observación y encuesta en boca de cajera de almacenes de grande superficies, confirmado por los sabios.

Imagínese qué clase de economía doméstica puede ser esa, donde para que la familia se alimente se ven obligados a usar el crédito, muy distinto por cierto del que todavía ofrecen los tenderos a sus buenos clientes durante años, ahora venidos a menos. Y aunque esa última frase es de origen elitista, la uso porque describe exactamente lo que nos está sucediendo a los ciudadanos comunes de la clase media económica (hoy batiburrillo de académicos, artistas, profesionales): estamos pasando de ese medio de equilibrio delicado a una franja inmensa donde residían técnicos y artesanos que se proletarizaron al perder sus empleos o porque tuvieron que cerrar el taller. ¡Va de retro!

De manera que si ya se usa el crédito para adquirir la canasta familiar (suelen ponerla a tres cuotas, no sé por qué) y la cifra del endeudamiento hace mucho que rasca el cielo, no se puede menos que concluir que hay algo que no está funcionando de forma correcta y podríamos asistir a un trastazo como el que se dieron en Argentina, hace muchos años para un mundial de futbol. Todos gastaban con primor a crédito y vivían felices y una mañana cualquiera amanecieron sin nada y el país pasó de la gloria al infierno. Las tarjetas de crédito son para otra cosa.

Fuente: http://www.elheraldo.co/opinion/columni ... ador-67285
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