Corrupción al desnudo

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Darloup
 
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Corrupción al desnudo

Message : # 2663Message Darloup »

Si se ha de creer a los colombianos encuestados por el Centro Nacional de Consultoría, CNC, contratado por la revista Credencial, sobre corrupción, en las entidades oficiales solo muy excepcionalmente se le pide a alguien un soborno para acelerar un trámite, o para que el policía pase por alto una infracción. Los porcentajes en que se reconoce la “pureza” de los trabajadores oficiales son altos. 91% afirmaron que no han tenido que pagar por hacer o agilizar un trámite en una entidad pública, 92% no se han encontrado un policía que les haya pedido un soborno y 94% aseveraron que ningún empleado público les ha exigido soborno.
A pesar de eso, el 94% de los encuestados sostiene que el problema de corrupción en Colombia es grave. Si no es en el sector oficial, ¿dónde está la corrupción? Es la pregunta obvia. ¿En el sector privado acaso?

A menudo, en la extensa encuesta, los signos obtenidos lucen contradictorios.

No sé qué habría respondido usted, pero el 33% de los encuestados estuvo básicamente de acuerdo en que el gobierno actual es transparente. 31% estuvo de acuerdo con esa afirmación y 2% totalmente de acuerdo.

En cambio discreparon o tuvieron un total desacuerdo con esa afirmación los del 41%.

Ese gobierno, que según esta mayoría no es transparente, parece mutar cuando a los mismos encuestados se les pregunta si el Gobierno hace esfuerzos para desmontar la corrupción. El 83% aplaude esos esfuerzos. ¿Los hace un gobierno no transparente? .
¿Cambian acaso las percepciones de los encuestados cuando se pasa de una pregunta a otra?

Déjenme ensayar una explicación: son encuestados que, como la mayoría del pueblo colombiano, tienen una débil información y unas muy fuertes pasiones partidistas.

Si esta hipótesis es cierta, puede sustentar una explicación sobre la naturaleza de la libertad con que llegarán los votantes a las mesas de octubre. Animados más por las emociones que por una sólida información, esos votantes serán manipulables.

En la encuesta se encontraron preguntas sobre la honestidad de los candidatos a las alcaldías locales. En Cali el 37% pone en el mismo nivel al médico Rodrigo Guerrero, exalcalde de reconocida trayectoria, con otros de honestidad no conocida o sospechosos de deshonestidad, y dicen que ninguno garantizará una administración honesta.

Lo de Medellín es aún más revelador: al lado del exgobernador Gaviria, conocido y reconocido por su limpio ejercicio del poder, aparece Luis Pérez, también conocido y reconocido por una cuestionada alcaldía.

¿Pueden más que los hechos y las razones, las pasiones partidistas o las verdades incompletas de la publicidad preelectoral?

Más lúcidos emergen los barranquilleros encuestados, con su respuesta sin esguinces. El 57% cree que Elsa Margarita Noguera garantizará una administración honesta. Es una respuesta que no admite discusión porque después de ese contundente 57% siguen unos lánguidos 12%, 6% hasta llegar al 1% del sexto candidato.
¿Qué pasó en este caso? ¿Obra un conocimiento sólido, más fuerte que las pasiones partidistas? Los encuestados, a pesar de todo logran ver con claridad dónde está la corrupción y la señalan. Puestos a identificar los mayores escándalos de corrupción no tienen dudas: el ‘carrusel’ de las contrataciones en donde los dineros de todos acabaron en las manos avaras de los contratistas Nule, con ayuda de funcionarios sobornados. O sea el perverso mestizaje de la corrupción oficial y de la corrupción privada, quizás a eso se refieren las respuestas confusas sobre la ubicación de la corrupción.

La prensa debía estar en el primer lugar de las instituciones que luchan contra la corrupción, pero ocupa un melancólico quinto lugar que permite preguntar: ¿ y entonces, quién asumirá el papel de informar con credibilidad sobre la corrupción de la clase política en las próximas elecciones?

Fuente: http://www.elheraldo.co/columnistas/cor ... nudo-37302
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