Hombres del Atlántico, maltratadores

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Darloup
 
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Hombres del Atlántico, maltratadores

Message : # 2697Message Darloup »

Por Lola Salcedo C.

Así mismo: de cada diez mujeres que viven en Colombia ocho reciben maltrato de parte de su marido, su padre o sus hermanos.

Con una estadística tan aberrante, si se tratara de bienes materiales (amoblamiento público, propiedad privada, monumentos, etc.) ya en el Congreso habrían legislado con dureza y estarían llevando a las cárceles a los destructores.

Pero como solo son mujeres, pues fíjate que no les llama la atención, entre otras cosas porque muchos, demasiados de ellos mismos, la emprenden contra sus mujeres con todo tipo de violencia y, por tanto, les parece una cifra natural. Sí, lectores, he escuchado historias terribles de muchos de los que abogan por otros derechos y se desgañitan en su defensa.

Debemos reconocerlo: en nuestro país el género femenino está a salvo solamente en el papel, porque en la realidad todas hemos sido víctimas de algún tipo de abuso: verbal, sicológico, económico o físico. Pero cuando se sientan las estadísticas no van incluidas las miles de mujeres que callan, soportan, disimulan y dejan pasar… hasta la próxima andanada.

He visto en un restaurante a un joven estrato 8 mandar a callar a su mujer con virulencia; he visto cómo otro tipo entra a empujones a su esposa a un carro; hemos conocido de todo tipo de violencias en la intimidad de la familia, y nuestros niños crecen con esa impronta bien grabada: mujer, igual a propiedad privada y uso desmedido cuando se desee.

Sé de señoras que son obligadas a tener sexo, de mujeres forzadas a estar como un altar de Corpus para ser exhibidas, de mujeres constreñidas económicamente para que no se vayan, de mujeres a quienes les retienen a los hijos para que se queden, de mujeres impedidas de educarse o trabajar por los celos masculinos, de mujeres que constantemente se ‘tropiezan’ con algo y viven llenas de moretones, de mujeres que no pueden salir con libertad, de mujeres que tienen que estar en casa cuando el marido llega, de mujeres que ni siquiera pueden ver a sus familiares. Y podría seguir mencionando casos.

¿Qué nos hace tan sumisas y resilientes ante todas las formas de violencia? La mala educación, el paradigma de que lo mejor que puede pasarnos es conseguir un marido, la incapacidad productiva, pero sobre todo, el dominio masculino en lo sicológico, la creencia de que el hombre piensa mejor, sabe más y siempre tiene la razón.

Por eso callamos, aguantamos y sobrevivimos al lado de un cafre, porque nuestros miedos son exacerbados por la sociedad y no hay apoyo del Estado cuando acudimos a denunciar.

Y si Colombia va mal, Atlántico está peor, de cada tres mujeres una es víctima de algún tipo de violencia, violencia que ellos no consideran como tal sino como una forma de reeducar, de amaestrar a esa ‘cosa’ con vida que les sirve, entre cuyas piernas, contradictoriamente, colocan su honor. Y en defensa de esa dignidad inexistente nos maltratan, nos abusan y nos matan.

Fuente: http://www.elheraldo.co/columnistas/hom ... ores-39075
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